San Baudelio

En una colina de la provincia de Soria existe una pequeña iglesia mozárabe, a simple vista puede parecer austera y fría, pero cuando accedes al interior encuentras algo que nunca imaginarías ver allí, en medio de la nada.
En el centro una gran columna que sujeta unos arcos, imitando a una palmera en la que se apoya el techo (una plamera en medio de Soria!!). Las paredes llenas de pinturas, que, apesar del devenir de los tiempos y de que muchas han sido extraídas y llevadas al Metropolitan de Nueva York o a nuestro Prado, conservan parte de su antigua belleza. Fascina pensar como se vería recién pintada.
Y por último, "la joya de la corona", en una iglesia que no ocupará más de 20 metros cuadrados, un coro!! sujetado por arcos imitando a los de la mezquita de Córdoba; además, si tienes suerte, y el amable hombrecillo que custodia su tesoro te permite subir a verlo, aparte de acercarte a ver los frescos del techo, puedes ver grafitis del s. XVII. No os resulta encantador?. Desde luego que los tesoros más preciados se encuentran en los lugares más alejados, aunque desgraciadamente los primeros en encontarlos suelen ser los expoliadores.